En el icónico estadio Maracaná, Millonarios cayó derrotado 3-0 ante Flamengo, en un partido marcado por errores defensivos y una falta de efectividad. Desde el inicio, Millonarios se presentó desdibujado, con un uniforme poco convencional de camiseta amarilla, pantaloneta azul y medias blancas, contrastando con el tradicional atuendo a rayas rojas y negras de Flamengo. El equipo de Alberto Gamero planteó una defensa de cinco jugadores, cuatro mediocampistas y un único delantero, Émerson Rivaldo Rodríguez, pero esta táctica no funcionó debido a graves errores en defensa.
El primer gol de Flamengo llegó temprano, a los siete minutos, tras un mal pase de Daniel Giraldo y una falta de reacción del portero Álvaro Montero. Pedro, delantero de Flamengo, aprovechó el error, interceptó el balón, dribló al portero y marcó el primer tanto. Este gol tempranero desestabilizó a Millonarios, que se vio superado mentalmente y cometió más errores defensivos. El segundo gol fue consecuencia de una serie de fallas: David Luiz superó a Rodríguez y, tras un centro de Gerson que se desvió en Juan Pablo Vargas, el balón terminó en la red de Montero.
Antes del descanso, Flamengo anotó el tercer gol por medio de Pedro, quien aprovechó un pase filtrado de Matías Viña. Aunque el VAR revisó la jugada por un posible fuera de juego, el gol fue validado. Con un contundente 3-0 al final del primer tiempo, Millonarios se encontraba en una posición complicada, con pocas oportunidades de revertir el marcador.
En el segundo tiempo, Flamengo mantuvo la presión, generando varias ocasiones de gol en los primeros minutos. Millonarios, incapaz de mantener la posesión del balón, realizó cambios tácticos. Gamero sustituyó a Jorge Arias por Yuber Quiñones y a Ruiz por Juan Esteban Carvajal, lo que permitió al equipo mejorar ligeramente y realizar su primer disparo al arco, un remate de Silva que fue detenido por el portero Rossi.
A pesar de la desventaja, Flamengo continuó dominando el juego hasta que Bruno Henrique fue expulsado por una dura entrada sobre Luis Paredes, tras la revisión del VAR. Con un jugador menos, Flamengo bajó el ritmo, pero Millonarios no logró aprovechar la situación para cambiar el marcador.
La eliminación de Millonarios en la fase de grupos de la Copa Libertadores marcó el final de una campaña decepcionante. A pesar de los éxitos locales en los últimos cuatro años, el equipo no pudo replicar su rendimiento a nivel internacional este semestre. Esta derrota dejó claro que el club necesita revisar y ajustar su estrategia para futuras competiciones.
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